jueves, 6 de marzo de 2014

Hundida y frustada.

   El otro día llegó a casa el cuaderno viajero. Es un cuaderno en tamaño A4 en el que cada niño hace tareas el día en el que se lo lleva a casa, lo firma su mami o su papi y lo devuelve para que otro niño se lo lleve al día siguiente y realice sus deberes. Yo no lo conocía y cuando lo vi y vi que aparecían nombres de otros compañeros, pensé que Ale se había equivocado de cuaderno, pero como traía dos, ya me di cuenta en que consistía el asunto.

  Me imagino que este cuaderno en que veo los deberes que han hecho el resto de los niños y lo bien que escriben y lo ordenados que son y la buena letra que tienen tendrá una finalidad importante.. pero en este momento la desconozco y lo único que me ha ocasionado a mí es un motivo para comparar a mi hijo con los demás y querer exigirle al peque algo que él no me da.

  Nos pusimos a hacer los deberes y me di cuenta de que me estaba enfadando con Ale por no hacer las cosas tan bien como las veía en las hojas de los otros niños. Él lo estaba haciendo como siempre y yo estoy en general contenta con lo que sabe y con lo que trabaja, pero el hecho de ver lo que hacen los demás me había llevado a exigirle algo al niño que no debo exigirle. De repente me di cuenta de lo que estaba haciendo y de que me estaba frustando mucho y frustrándolo a él y le dije que lo dejara.. que ya ese día no hacíamos más deberes. He pedido tutoría con la profe, la tengo para el martes que viene.

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